Mientras nuestra luz, activada se acrecienta en nuestro interior (corazón), desde el corazon de nuestros MAGOS, capaces de materializar con gran rapidez... y con todo esto... la tristeza ... por momentos nos invade; Esto es algo normal, después de haber estado atados a viejos y repetitivos patrones, que hacen ahora que seamos como bebés aprendiendo a andar y hablar de nuevo.
Hay un gran forcejeo entre la luz y la oscuridad. Está ocurriendo en nosotros, en nuestras vidas, en nuestro mundo. Mientras nuestra luz, activada se acrecienta en nuestro interior (corazón), desde el corazon de nuestra madre Gaia, está ocurriendo lo mismo.
La oscuridad que hay en nosotros,está saliendo a la superficie y no se va con tanta facilidad, si no la integramos y la aceptamos. Nuestra alma es en esencia amor, es luz y esa luz tiene su polaridad en la oscuridad, PODEMOS INTEGRARLAS LAS DOS, y sin embargo, debemos trabajar en todo aquello que no es amor (luz), aquello que reflejamos que no nos gusta, y es justo lo que debemos hacer, siendo muy concientes. Reconocer esa oscuridad en nosotros para integrarla....
El mayor potencial de nosotros mismos, lo alcanzamos cuando conseguimos reflejar nuestra luz de manera consciente, y reconocemos al mismo tiempo lo que no es parte de nuestra esencia divina.
Hay un gran forcejeo entre la luz y la oscuridad. Está ocurriendo en nosotros, en nuestras vidas, en nuestro mundo. Mientras nuestra luz, activada se acrecienta en nuestro interior (corazón), desde el corazon de nuestra madre Gaia, está ocurriendo lo mismo.
La oscuridad que hay en nosotros,está saliendo a la superficie y no se va con tanta facilidad, si no la integramos y la aceptamos. Nuestra alma es en esencia amor, es luz y esa luz tiene su polaridad en la oscuridad, PODEMOS INTEGRARLAS LAS DOS, y sin embargo, debemos trabajar en todo aquello que no es amor (luz), aquello que reflejamos que no nos gusta, y es justo lo que debemos hacer, siendo muy concientes. Reconocer esa oscuridad en nosotros para integrarla....
El mayor potencial de nosotros mismos, lo alcanzamos cuando conseguimos reflejar nuestra luz de manera consciente, y reconocemos al mismo tiempo lo que no es parte de nuestra esencia divina.
Por esto es tan importante estar muy atentos a lo que estamos reflejando.
En este momento de transición, sentimos una gran desconexión, en la que entra en juego nuestra voluntad, y la puesta en funcionamiento de nuestro nuevo sistema operativo de nuevos Humanos que funcionan desde el corazón. Manejando la polaridad luz-oscuridad, soltamos los grilletes de la vieja 3D.
de Maria J Garcia
http://despiertadesdeelcorazon.blogspot.com.es
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