Audio
Yo soy el arcángel Jophiel, Arcángel de la Luz dorada y del Conocimiento. Vengo a proseguir junto a ustedes un cierto número de informaciones que les he ya comunicado desde algunos meses. Vengo hoy a prepararlos. Están, en efecto, al alba de un día nuevo. Quien dice "alba de un día nuevo" significa que actualmente están en la noche, en la oscuridad donde la Luz no brilla. Por las elecciones de vuestras encarnaciones experimentan, en grados diversos, en espacios diversos, la experiencia de la separación, la experiencia de la Sombra y buscan ardientemente la Luz. Vuestro globo, donde están encarnados, los ha acompañado en ese periplo y en esa marcha. Él ha hecho, como ustedes, la promesa de volver un día a la Luz. Así como ustedes han hecho un día la promesa de volver a la Luz. Los múltiples juegos de vuestras encarnaciones han desembocado en una opacificación de vuestra Luz interior con el fin de vivir, a grados diversos, la experiencia, como ya lo he dicho, del dolor, de la pesadez. Vuestra Tierra y ustedes mismos están realmente, ahora, al alba de un día nuevo pero antes que el alba llegue hay que descender a lo más profundo de vuestra interioridad para encontrar el impulso necesario a vuestro regreso a la Luz, si tal es vuestra elección, si tal es vuestro destino. Nadie viene a forzarlos, nadie viene a obligarlos a elegir la Luz. Sean bien conscientes que el período que ha sido inaugurado al comienzo de este año, confirmado al comienzo del mes de mayo de este año, que va a durar un cierto tiempo, es un proceso de maduración, de madurez, que debe conducirlos, poco a poco, de manera gradual, hacia un proceso llamado "ascensión" o "despertar". No se trata de un despertar limitado a vuestra dimensión sino un despertar que conlleva un acceso amplio a vuestra transdimensionalidad. No se trata solamente de un regreso o una reconexión a vuestra Esencia sino más bien de una ampliación a estados múltiples del ser a los cuales ustedes no tenían acceso hasta el presente. Yo decía, en una intervención precedente, que a medida que pasaran las semanas que transcurren en adelante un número de ustedes tendrán acceso a esta transdimensionalidad, a la dimensión de contactos transpersonales, en particular con el mundo de donde yo vengo que es el mundo angélico. Eso podrá hacerse de diferentes maneras, por diferentes vías, a diferentes momentos, que algunos de ustedes ya experimentan, que es el contacto con el Ángel. El contacto con el Ángel no es el despertar sino simplemente la promesa, si tal es vuestra elección, de ayudarlos en ese periplo nuevo de este día nuevo que viene hacia ustedes. Me gustaría decirles también que he venido, en este año que ustedes viven, a inaugurar lo que he llamado, durante mi primera intervención, el año de la conmoción. En efecto, dejar un estado para acceder a otro estado, por luminoso que sea, necesita siempre hacer un duelo. Se trata de un nuevo nacimiento y así pues también de una nueva muerte, para los que lo deseen.
Ustedes están confrontados, y serán cada vez más confrontados, a las necesidades imperiosas de elección, de decisión, que llama a veces a conmociones inmediatas e importantes de vuestros caminos de vida. A medida que avancen en este año (y en el período de los cuarenta y dos meses ya mencionado) deberán, si tal es vuestra elección, despojarse. Despojarse quiere decir ponerse al desnudo, quitar las Sombras, quitar lo que estorbaba hasta el presente la manifestación del ser de Luz que ustedes son. Para eso tendrán que vencer ciertos apegos, ciertos comportamientos. Tendrán que superar ciertas condiciones. Tendrán que estar afirmados en vuestra voluntad y vuestra certeza de Luz. Al mismo tiempo de la irrupción de la Luz, a medida que ustedes se acercan al alba de un día nuevo, notarán, en el interior de vuestras vidas, en el interior de vuestros campos vibratorios hasta el nivel más físico, la presencia de tensiones contradictorias entre la voluntad de Luz y la voluntad de las Sombras. Nadie los juzgará. El Ángel se presenta con el fin de que, en todo conocimiento y en toda conciencia, tengan acceso a la libre elección de las decisiones que hayan formulado hace ya algunos años. Pero hoy, se necesitan actos. Hoy no se trata más de una decisión mental sino de una decisión concreta que compromete totalmente, para una duración larga, el camino que ustedes tomarán dentro de la nueva dimensionalidad o, al contrario, el camino que tomarán dentro de los campos de experiencias de la tercera dimensión. No hay ningún juez si no es vuestras propias elecciones. El único problema, a través de esta alba que hace irrupción pronto en vuestras vidas, en vuestro planeta, se traduce por un cierto número de tensiones hacia las dimensiones que opone todo: dimensión de la Sombra (que no es negrura sino que solo es ausencia de Luz y prosecución de la experiencia de la encarnación) y del otro, la elección de la Luz, la elección de transportar este cuerpo que los anima en la Luz. A veces, para algunos de ustedes, eso será la elección de la Luz pero sin el cuerpo. No les esconderé que la mayoría de la humanidad presentemente encarnada en la superficie de este planeta ha decidido proseguir la experiencia de la encarnación. Es su libertad, es imprescriptible, es inviolable y es respetable. Hoy ustedes están en los instantes donde deben posar los actos concretos, reales, materiales, de vuestras elecciones. No pueden quedar entre dos elecciones. Eso no es más posible.
Recuerden también que yo hablaba de duelo, de dejar un estado para acceder a otro estado. Cualquiera que sea la Luz del estado por venir, si ustedes la eligen, no hay que engañarse ya que habrá que separarse de cosas, a veces de manera dolorosa. Pero la experiencia que se les propone es única en la historia de las almas. Se trata de grandes instantes, de grandes momentos que se presentan a ustedes. El alma humana, durante su descenso en encarnación, en este ciclo, o den los ciclos anteriores, encarnaciones decididas de su propia elección, ha prometido y ha recibido la promesa del Ángel que en el momento oportuno la reconexión estaría de nuevo activa. Son estos momentos que ustedes viven ahora. Cada uno a su manera, cada uno a su modo, vive hoy el reencuentro con el Ángel que viene a recordarles su promesa y la necesidad imperiosa de elegir la ascensión o la prosecución de la experiencia. No se trata de un acto intelectual, no se trata de un acto emocional, se trata de un juramento y de un acto concreto que compromete, de nuevo, yo lo repito, el destino del alma. Traten de demorarse lo menos posible sobre las Sombras que los atan. Pero, de nuevo, si deben elegir el camino de la experiencia de la encarnación de nuevo, habrá de todas maneras, también, que vivir el duelo de la luz, esta vez. En un caso como en el otro, dicho de otra manera cualquiera sea vuestra elección, es tan respetable como la otra elección pero no les hará economizar la sensación de duelo y de nuevo nacimiento. Existe una sola manera para el alma que decide proseguir la encarnación de recordarse la promesa del Ángel: es hacerle revivir la promesa del Ángel. Así es el caso para cada fin de ciclo y para cada nuevo ciclo. Repito también: no se demoren en el estrépito del mundo, no se detengan en los ruidos de este mundo. Cualquiera sea la naturaleza de los acontecimientos que han golpeado, golpean o golpearán las multitudes de seres humanos en diferentes lugares del globo, tales como los he definido durante mis últimas intervenciones, lo que golpea no golpea al azar sino corresponde a las elecciones de grupos de almas. No vean una desgracia, sino vean una liberación para permitir vivir la promesa del Ángel y con el fin de hacer la elección de quedar sin cuerpo en ascensión o de tomar cuerpo para continuar la experiencia. Ese pasaje es un pasaje obligado. No hay otra alternativa. Ese pasaje no es ni un castigo, ni una recompensa. Ese pasaje forma parte de la existencia misma de los ciclos. Ciclos ilustrados por el día y la noche, ciclos ilustrados por las estaciones, ciclos ilustrados por los elementos y por los movimientos mismos de los sistemas solares. Ustedes están realmente al alba de un día nuevo. Hay que penetrarse de la energía del Ángel. Un cierto número de estructuras fisiológicas se modifican en ustedes con el fin de permitir ese pasaje y esa elección. Todo ser humano, digo bien todo ser humano, vivirá este pasaje. No existe ningún alma que se salve de ese pasaje. De nuevo el estrépito del mundo no les concierne de manera exterior sino más bien interior. Lo que ustedes observan al exterior dicen bien que eso sucede al interior en alguna parte en vuestro cuerpo. Pronto, comprenderán que el mundo que observan al exterior de ustedes no es más que ustedes mismos, que no sirve de nada criticar tal o cual acción, tal o cual persona porque todo eso les pertenece y es ustedes mismos. Queridos seres de Luz en encarnación, mi presencia está destinada sobre todo a favorecer esta transdimensionalidad, el acceso a vuestro Ángel. Antes de hacerles comulgar a este espacio de transdimensionalidad por la irradiación de la Luz dorada que me anima, si tienen interrogaciones concerniendo, de manera exclusiva, lo que acabo de hablarles, voy a intentar aportar una iluminación suplementaria.
Pregunta: ¿Qué entiende usted por "acto concreto"?
Entiendo por "acto concreto" la noción de concretizar, de volver reales, de volver manifestados una decisión y una elección. El ser humano en encarnación tiene tendencia, en regla general, a tomar decisiones en su cabeza, en sus campos vibratorios sutiles y, muy a menudo, a no llevarlas a término nunca porque, muy a menudo, les parece tener todo el tiempo. Existen períodos de la historia del alma donde los tiempos de la encarnación son contados. El acto concreto es la confirmación de vuestras elecciones. Es un compromiso marcado por el sello de vuestra alma y de vuestro Espíritu. Este aspecto concreto puede tomar, según las almas, caminos diferentes. De nuevo, pueden necesitar ciertas formas de desgarros con respecto a vuestros allegados, con respecto a vuestro país, con respecto a vuestras costumbres, con respecto a vuestros modos de funcionamiento. Ya que se trata de un cambio completo de paradigma, de visión y de vida, muy simplemente que no es mañana, es hoy.
Pregunta: ¿Cuál es la diferencia entre ascensionar con o sin el cuerpo?
Hasta el presente el proceso de la muerte no era un proceso de ascensión. El proceso de la muerte era un proceso de liberación de una cierta materialidad que permitía el acceso a una cierta dimensión calificada de intermedia, pero, en ningún caso, una ascensión directamente en la Luz. Una visión de la Luz, un acceso a ciertos mundos infra-luminosos, para algunos. Hoy toda alma que deja su vida, su cuerpo, se ven proponer la elección de la reencarnación o de la ascensión. Ahora, en lo que concierne el proceso de ascensión con el cuerpo, es un proceso extremadamente luminoso, extremadamente potente. Los remito para eso a las palabras grabadas por San Juan en el Apocalipsis. La ascensión con el cuerpo necesita un cierto número de condiciones previas. Recuerden las palabras de San Juan. "habrá muchos llamados, serán marcados en la frente". Los elegidos, por más que ese término pueda parecer presuntuoso, corresponde sin embargo a una realidad: los seres que habrán hecho la elección consciente, deliberada, concreta, de la ascensión con el cuerpo, llevarán el cuerpo físico en la nueva dimensión que es otra forma de corporeidad pero que no está más sometida a las mismas leyes que ustedes experimentan en encarnación sobre este planeta. Ese proceso es un proceso energético que se refiere a los fenómenos de desbloqueo utilizando las claves ascensionales que ya han sido evocadas (ndt: canalización de la Intra Tierra del 23 mayo 2008). Una vez más, ustedes no están ahí. Se les pide, en este año, estar en lo concreto de vuestras elecciones y de vuestras decisiones. Es un período, para los que quedan en encarnación, donde la transdimensionalidad, el contacto con el Ángel, es esencial. No serviría de nada detallar el proceso ascensional en sí mismo mientras ustedes no estén en los últimos instantes de la noche que precede la emergencia del alba. Retengan simplemente que los que han decidido ascensionar sin el cuerpo (se trata en ese caso de lo que ustedes llaman partidas en masa) lo hacen total lucidez. Las dos rutas, los dos caminos son mostrados: proseguir la experiencia de la encarnación o elegir la ascensión, de manera de volver con un cuerpo ascensionado sobre la nueva Tierra, en un tiempo relativamente próximo.
Pregunta: ¿Los que van a ascensionar con el cuerpo tendrá por rol recibir a los que van a ascensionar sin el cuerpo?
En una cierta medida, para un cierto número, la respuesta es "sí".
Pregunta: ¿Hay una relación entre lo que ustedes llaman la ascensión y lo que nosotros llamamos física cuántica?
Puedo responder "sí" pero de manera muy vaga.
Pregunta: ¿Cómo se puede traducir el contacto con el Ángel?
Por una percepción, por una visión concreta de vuestro Ángel. Generalmente, en un primer tiempo, bajo forma de lo que ustedes llaman "sueño". Para la mayoría de ustedes en un fenómeno que sobreviene de manera nocturna por la activación previa de ciertos canales de transcomunicación que pueden traducirse por vibraciones a nivel de vuestras estructuras corporales, a nivel de la cabeza pero también del corazón. Pero se trata de un encuentro real. Un Ángel no es un hombre salvo si éste viniera a tomar cuerpo, pero, en ese momento, estaría en encarnación de carne como ustedes. Yo hablo de transdimensionalidad, de transcomunicación, por tanto de contacto con un ser de pura Luz.
Pregunta: ¿Cómo estar en el soltar total para estar en coherencia con nuestra alma, a pesar de nuestros miedos, nuestros apegos?
Si yo respondo a esta pregunta interferiría con la venida de la que, en su vida, se llamaba Ma Ananda Moyi. La dejaré responder a esta pregunta que es además el objetivo de su intervención (ndt: canalización de Ma, el mismo día, 19 junio 2008).
Pregunta: ¿Las vibraciones fuertes, la pesadez, pueden reflejar una comunicación con el Ángel?
Sí.
Pregunta: ¿Esta forma de comunicación con el Ángel no está bloqueada por nuestro propio psiquismo?
En algunos seres, sí. La revelación de la presencia del Ángel no es suficiente, en sí misma, para procurar el despertar o la liberación o la ascensión. Está simplemente ahí para recodarles la promesa, cualesquiera sean vuestras elecciones.
Pregunta: ¿Cómo facilitar en el mejor de los casos esta transcomunicación?
No necesita un trabajo particular. Está inscrita en la lógica de los acontecimientos ineluctables de los fines de ciclos. Se manifiesta en este año de conmociones ya que el encuentro con el Ángel es una conmoción.
Pregunta: ¿Cómo se articula la elección de la encarnación con la de la ascensión?
Repito: la elección de la encarnación se hace en un ciclo en el cual ustedes están actualmente puesto que están encarnados. En ese ciclo, que se extiende sobre muchas decenas de millares de años de vuestro tiempo, ustedes tienen muchas encarnaciones. La elección que se propone hoy no tiene nada que ver con una elección de encarnación. Es una elección entre la ascensión (con diferentes modalidades) con la elección de la encarnación de la experiencia de nuevo es decir prolongar el ciclo (recomenzar un ciclo más exactamente). Mientras que, entre dos encarnaciones en el mismo ciclo, ustedes no tienen la elección. La diferencia esencial está a ese nivel.
Pregunta: ¿El nivel de conciencia puede intervenir?
Sí. Más el nivel de conciencia es amplio, más la madurez de la conciencia es grande, más la conciencia es consciente, más el encuentro con el Ángel es fácil. Pero no se engañen: la conciencia puede ser extremadamente amplia y sin embargo presentar numerosos apegos o ciertos apegos extremadamente sólidos. Mientras que, al contrario, para otras almas encarnadas que tendrían una consciencia menos amplia pero cuyos apegos serían más débiles a la encarnación, para ese tipo de almas también la transcomunicación del Ángel podría ser mucho más fácil.
Pregunta: ¿Para facilitar esta transcomunicación se puede pedir, al momento del adormecimiento, estar en contacto con lo que se llama el alto astral?
El alto astral pertenece a vuestra dimensión de vida y de experiencia. No está más allá de la tercera dimensión. Es incluso la especificidad de ella, incluso a su nivel más alto. La transdimensionalidad de la que doy cuenta se sitúa sobre niveles vibratorios o dimensionales mucho más elevados, que son incluso mucho más elevados que los niveles que ustedes llaman, en vuestra encarnación, la quinta dimensión. Así pues convendría más bien pedir, antes de dormir, un acceso no al alto astral (que es la misma dimensión, que la vuestra a un nivel más etéreo) sino el acceso a la transdimensionalidad y así pues el encuentro con el Ángel.
Pregunta: ¿Se puede estar en contacto con el que se llama Cristo?
Sí, de múltiples maneras, con la condición de no, en una expresión que ustedes emplean, confundir Roma con Santiago. El Cristo es una alta entidad. El Cristo es un nivel vibratorio y una presencia que está mucho más allá de lo que algunos creen transmitir a través de ciertas denominaciones de tipo oriental o hinduista que solo son parodias muy lúgubres de lo que es el Cristo. Sin embargo, todo ser humano encarnado tiene la posibilidad real de contactar y de comulgar con Cristo. Él ha dicho, durante su vida: "cuando estén tres reunidos en mi nombre, yo estaré entre ustedes". Eso era y es una realidad. Sin embargo hay que usar el discernimiento, y no el juicio, para reconocer lo que viene de la Luz de lo que no viene de la Luz. El Cristo es también un estado interior que necesita una pureza absoluta del corazón y no del canal. Lo que explica que entidades humanas encarnadas, profundamente deterioradas a nivel de su cuerpo físico, hayan podido encontrar el Cristo, en todas las naciones, en todas las épocas. La comunicación con el Cristo es una comunicación que pasa por el corazón y no por el canal.
Pregunta: ¿El Cristo está verdaderamente presente en la iglesia católica?
El Cristo está presente en el ser humano. No está nunca presente en las representaciones o asociaciones, cualesquiera sean. El Cristo está presente en la hostia si el sacerdote que oficia es el cuerpo de Cristo. No basta subir una hostia para, que a través de un ritual, el cuerpo de Cristo sea. Sin embargo, la persona que tiene suficiente fe y la fe en esta hostia y el Cristo, entonces, tendrá el Cristo. Pero todo depende de la fe del que oficia pero sobre todo de la fe del que recibe. Pero, en ningún caso, el Cristo está presente en esas asociaciones humanas que reivindican la presencia del Cristo. Una cosa es reivindicar un estado, otra cosa es vivirlo.
Pregunta: ¿Cristo acompaña los cambios que vivimos?
Cristo ha dicho en el Apocalipsis que volvería como ha partido. Cristo ha ascensionado con su cuerpo físico. Volverá tal como ha partido, con el cuerpo de Gloria, tal como lo ha dicho, tal como lo ha escrito San Juan. Cristo llegará después, en el momento último. Las etapas preparatorias que viven desde numerosos años están orquestadas ante todo por las dimensiones arcangélicas pero también para los que ustedes han llamado, a vuestra manera, vuestros hermanos galácticos. Cristo está presente en el hombre que tiene el corazón puro. Cristo está presente, de manera exterior (o exteriorizada, si ustedes prefieren) en el momento propicio donde el día amanece no antes.
Pregunta: ¿Los Evangelios son fiables?
Las alegorías son importantes. No vean una historia real y concreta sino más bien la historia de una epopeya, no histórica en el sentido literal. Lo importante es la alegoría, excepto para el Apocalipsis llamado de San Juan que describe de manera formal, extremadamente precisa y detallada, vuestra época. Eso solo tiene poca importancia en el proceso que ustedes tienen que vivir hoy ya que esos acontecimientos son los mismos hayan leído la Biblia, el Corán, las Escrituras Bíblicas o cualquier otro tipo de escritura.
No tenemos más preguntas, le agradecemos.
Si ustedes lo permiten, pienso que es bueno ahora que procedamos a la emisión de la Luz dorada antes de dejar el lugar a la que se hace apremiante ahora y que ha sido llamada Ma Ananda Moyi (ndt: canalización del mismo día, 19 de junio 2008). Queridos seres de Luz en encarnación les pido descruzar brazos y piernas, abrir vuestra sonrisa interior, y recibir la vibración de la Luz dorada que va a serles retransmitida ahora. Yo les presento todos mis respetos por vuestro camino, todo mi agradecimiento por vuestra escucha. Sin embargo tendría necesidad, en el momento de la emisión, ya que debo poner de pie al canal, de un apoyo lateral, a izquierda y a derecha. Bastará, cuando esos apoyos estén ahí, tener firmemente el brazo del canal.
…Efusión de energía…
Canalizado por Jean Luc Ayoun
www.autresdimensions.info
Transcripción. Veronique Loriot
Traducción: A.I.
http://mensajes-del-espiritu.blogspot.com
"Aní Maritúmi, Aní Maritúmi, Aní Maritúmi".
"Salve el Fuego de Vida que todo Anima"
"Aní Maritúmi, Aní Maritúmi, Aní Maritúmi".
"Salve el Fuego de Vida que todo Anima"