THERESA DE LISIEUX. “La Ofrenda a la Vida no tiene necesidad de recibir. Abandonarse a la vida, abandonarse a la Luz, abandonarse al Uno, es ofrecerse enteramente, sin reservarse nada para sí mismo. No pueden ofrecerse a medias. No pueden ofrendarse con el propósito de gratificación.” Air. Del Colectivo del Uno. 21 de febrero de 2014. Con audio. ¡Compartir!!!!
Audio
Yo soy Teresa, Teresita.
Hermanos y hermanas, vengo aquí con ustedes para desarrollar un concepto que puede parecerles nuevo: que no es otro que el Abandono. Este concepto consiste en la Ofrenda, ofrecer todo lo que son en la Vida. Podría decir, ofrecer todo lo que son, a la Luz y ofrecer todo lo que ustedes son al Uno, sería lo mismo, pero ofrecerlo a la Vida no permite proyectarse en conceptos del Uno o de la Luz.
Si ustedes viven el Retorno a la Unidad, si ven al Uno trabajar en su templo, el Uno obrar en cada Uno, al Uno desplegarse en toda Vida, entonces saben: que el Uno es la Vida. En muchas tradiciones, es costumbre hacer ofrendas a las deidades. Esto a menudo cuando se efectúa, los coloca en noción de separación, en una noción de ofrenda, a fin de recibir.
La Ofrenda a la Vida no tiene necesidad de recibir. Abandonarse a la vida, abandonarse a la Luz, abandonarse al Uno, es ofrecerse enteramente, sin reservarse nada para sí mismo. No pueden ofrecerse a medias. No pueden ofrendarse con el propósito de gratificación. Cuando ustedes se ofrecen, poco importa que el Uno los tome, que el Uno los lleve a sufrir, que el Uno los lleve a la Paz. Ustedes se entregan totalmente en sus manos, y no importa que Él se digne inclinarse hacia ustedes o no.
Ofrecerse es un posicionamiento interno que no puede esperar nada, que nada espera, nada reclama. Cuando ustedes se ofrecen, entonces el que recibe es libre de tomar o dejar. Aquí está el Abandono total. Se ofrece todo, ya sea lo que se cree ser, o lo que se sabe que no se es. Ya sea que ustedes crean ser un cuerpo, o que lo que viven no sea este cuerpo, lo que sea, ofrecerlo a la Vida. Dejen a la Vida hacer lo que le parezca. Ahí está la Humildad, ahí está el reconocimiento de que sólo la Vida, solo el Uno puede dar a la experiencia de su Vida, el sentido, la Verdad.
Si el cuerpo, si los pensamientos pudieran llevarlos a la Verdad, ¿no creen que ya eso se habría hecho? ¿Qué pueden ustedes evaluar, si no conocen la Verdad? Por otra parte, la Verdad no se conoce, la Verdad se vive. No encaja en el funcionamiento de la persona. Ya lo saben, porque si ustedes están todavía dentro de la persona, vean bien, que no ven la Verdad. Creen verla a la derecha, y para allí corren, creen verla a la izquierda, y para allí corren, pero nunca la encuentran.
A veces ustedes son llevados a clamar por lo que creen, pensando que si hay adhesión, será entonces una verdad. Pero la Verdad se vive en la cabeza la cabeza con el Uno, con toda Humildad, en toda Simplicidad.
Bueno, vuelvo a la Ofrenda, la Ofrenda de lo que de alguna manera esta perdido, para dejar aparecer la Vida...
Ustedes saben, yo me ofrecí entera, aceptando los sufrimientos, la intimidación, los trabajos de todo tipo, porque no podía ver otra cosa que la Ofrenda a la Vida. No había oportunidad de juzgar, de evaluar lo que se desarrollaba, no había sino posibilidad de vivir.
Yo estaba lista para desaparecer por Él, yo estaba dispuesta a sufrir. Y lo hice, yo me hice pequeña. Y no fui otra cosa que un océano de Amor en el Uno.
No estoy diciendo de ofrecerse para ser grande en el Uno, porque entonces ya no se ofrecen, ustedes ponen en marcha una estrategia. Ofrézcanse y vean, vean por sí mismos lo que les trae la Vida. No evaluando los eventos, porque cualquiera que se ofrece ya no evalúa nada más, solo ve fluir todo como un niño, asombrándose de todo, receptivo, acogiendo la Vida en todas sus formas...
Esto, yo lo sé, puede parecer un esfuerzo, puede parecer complicado. Pero esto es de una extrema Simplicidad. Abandonen el control y lo verán por sí mismos: estarán sorprendidos como un niño mirando el mundo.
En la Creación, el Uno se ofrece al Uno a cada momento. Las líneas de depredación, como fueron llamadas, transformaron la Ofrenda en compromiso: en tomas de poder, en relaciones de fuerza, en limitaciones, conduciéndolos a proteger lo que ahora puedan ofrecer el Uno.
Así que, no les pido que crean en mis palabras. Vivan el Abandono total y constaten por sí mismos y la Paz los inundará a cada instante.
El Alma se ha vuelto hacia el Espíritu, ella ha abandonado la Materia, ella se abandonó. Y ella ahora se ofrenda Se Ofrenda al Espíritu, se Ofrenda a la Vida, llevando la Danza a desplegarse.
Si tienen preguntas con relación a lo que acabado de decir, me gustaría responder.
Pregunta: ¿Cual es la diferencia entre “vivir la Vida y ser la Vida”?
Es necesario entender bien esto. Intentamos con sus palabras pintarles la Verdad. Pero las palabras están concebidas para funcionar dentro de la Ilusión. Así que lo que yo pondría como diferencia entre “vivir la vida” y “ser la vida”, realmente tiene muy poca importancia. La vida es lo que son, en función de lo que ponen detrás del concepto de Vida. Es por eso que les dije de abandonarse, de ofrecerse a la Vida, de ofrecerse a la Luz, de ofrecerse al Uno. Yo lo sé por haber vivido en esta humanidad, ya que es muy fácil dejarse llevar por un concepto de lo que es la Vida, de lo que es el Uno, de lo que es la Luz. Y cada uno de estos conceptos solo los llevará a lo opuesto de la Vida, de la Luz y del Uno.
Un montón de libros hablan de la Luz. ¿Eso los llevó a vivir la Luz? No. Para algunas personas sí, para otros no. Esto les dio una idea, una noción. Ellos han hecho una creencia, y cada vez que la Luz viene hacia ellos, se dicen: “¡Oh!, esto no es la luz, ya que no coincide con el concepto que yo tengo”. Además, es complicado para mí, sin que definamos los términos “vivir la Vida” y “ser la Vida”, responder con precisión esta pregunta.
Tal vez tú haces referencia a otro mensaje recibido...
Si.
¿Me puedes decir el mensaje que voy a intentar informarme...
Pregunta: Alguien precisó: “No vivas tu vida, sino sé la Vida”.
Sin duda eso viene del hecho que tú te distancias de la Vida. En ese momento, “ser la Vida” significa “ser Uno con la Vida”.
No hay más preguntas.
En este caso, concluiré mi intervención diciéndoles de nuevo: ofrézcanse, abandonen todo, déjense acoger por el Uno.
Con todo mi Amor de Hermana, les digo hasta pronto.
Transmitido por David Air.
No hay comentarios:
Publicar un comentario