Mowlavi. El Giro del Fuego. ¡La locura del Fuego del Amor Divino! Agnimitra Om. 25 de noviembre 2013. Con audio. ¡Compartir!!!
Transcripción realizada por colaboradores de Agnisangha
Traducción del portugués: Lucía Montaño Ferrer.
Audio
Intervención del Ángel Guardián de Agnisangha, el Melchizedek Mowlavi, que tuvo lugar después de la comunión con la Energía Femenina. Un fuerte impulso para la trascendencia de las limitaciones impuestas por la comprensión siempre parcial de la enseñanza transmitida y una invitación amorosa a danzar en la Hoguera del Amor Divino.
¡Que gire la Rueda del Fuego! Mi Corazón es una hoguera, ¿quién se atreve a saltar en esta hoguera? Yo regreso a convidaros una vez más a danzar conmigo en esta hoguera del Fuego Vivo. Girar como los planetas que giran en torno al sol. Cantar como los ríos cantan en alabanza a su fuente. Enloquecer en esta sagrada locura que es este Amor.
Mi hoguera no tiene dueño. Mi Amor no pertenece a nadie, no hay nadie en este Amor. Hoy, vosotros llegáis a una velocidad tal al giro del Amor así como si un amante y Amado ya se hubieran fundido el uno en el otro o, simplemente se hubieran disuelto en mi hoguera, una hoguera que no tiene dueño.
¿Quieren saber cuál es el nombre de mi hoguera? Locura. Porque el Amor solamente acepta en sus aposentos, a locos. Porque es necesario enloquecer para soportar la intensidad de este Fuego de Amor. Porque es necesario enloquecer para aceptar que no tienen un “yo” en “vosotros”. Es necesario enloquecer y deteneros en donde vosotros estáis para permitiros ser arrastrados por la potencia de mi giro.
Yo soy Mowlavi.
Dos alas de fuego pululan por allá y por acá. Dos hilos de plata se rompen entre un corazón amargado y un poco de agua limpia.
¿Para qué sirve el sentido de las palabras, si la mente nunca conseguirá conduciros al reino de la sabiduría ilimitada? ¿De qué sirve el sentido de la razón, si la razón nunca os conducirá al sentir rectificado? ¿De qué sirve el entendimiento, si en mi hoguera reina la locura de los amantes desheredados de este mundo? ¿De qué sirve ser comprendido, si ningún olvido es capaz de penetrar en la esencia de mis palabras?
Yo no vengo hacia vosotros, vosotros no venís hacia mí. Esto es un Misterio. ¿De qué sirve tanta palabra, si ninguna de ellas tienen la llave de este Misterio? Yo os convido entonces solamente a danzar en mi Hoguera de Amor. Para que desde ahí en donde vosotros estáis, en la detención de todo movimiento, se entreguen.
Hay una brisa suave que el amante sopla en vuestro interior, disipando todo el polvo de los viejos conceptos, los aprendizajes, los formatos, hasta que quede solamente el Amado. Y ya no exista amante, y ya no exista Amado. ¿Quién mora ahí?
La casa que vosotros debéis construir es construida con los escombros de las viejas construcciones, de las viejas edificaciones que ya no sirven hoy. El templo que vosotros debéis erigir es un templo vivo que tiene doce columnas.
Ahora, un recordatorio a los constructores, una nota a los obreros: pongan de lado vuestros preconceptos, pongan de lado vuestras ideas preconcebidas con respecto de la verdad. Mi hoguera es la única puerta para el Reino de la Verdad. Y mi hoguera se llama Locura de Amor Divino. Yo espero a que después alguien venga a hablar de estas cosas con un poco más de sentido.
¿Estáis escuchando? ¿Estáis escuchando el canto de la Vida? ¿Para quién canta la Vida? ¿Será que la Vida canta a un oído y a otro no? ¿Será que la Vida canta solamente a aquél y a este no? ¿Será que la Vida canta solamente allá y no aquí?
No os engañéis, La Vida canta para ella misma. Vosotros sois la Vida cantando para sí mismos. La Verdad no pertenece a la tierra de los hombres, por cuanto vosotros os creéis solamente hombres, la Verdad siempre estará un paso al frente, siempre un paso al frente.
De nuevo, yo os convido: coloquen un pie en mi Rueda de Fuego. Giren junto conmigo el giro de la perpetuidad. Dejad que el velo del hombre se deshaga en la velocidad de esta danza. Dejad que las viejas ropas sean consumidas en esta Hoguera de Amor. Y entonces vosotros seréis la Verdad. Y entonces la Verdad no será más un objeto de conquista. Será solamente ella misma, en sí misma, pura, virgen, jamás confundida por los conceptos.
Como guardián de esta Red, como Ángel Guardián de este vórtice de almas flameantes, yo regreso para compartir un poco de esta locura con vosotros.
Este mensaje debe ser compartido con estos espacios de silencio, ¡hum!
¡Queden en paz! Amen al Amor más que a todo. Amen el Amor que todo Es. Amen el Amor que vosotros Sois, que Yo Soy.
Hasta cualquier momento.
Transcripción realizada por colaboradores de Agnisangha
Revisión Final: Agnimitra.
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