sábado, 29 de junio de 2013

Hoy la Madre Divina se manifestó como TARA, la Madre de la Compasión y Madre de los Bodhisattvas.


Divina Madre - Cómo mi Bodhisattvas. La Madre Divina se manifiesta como Tara, la Madre de la Misericordia y la Madre de los Bodhisattvas.Agnimitra. Del Colectivo de los Niños de la Ley del Uno. 27-06-13. Con audio. ¡Compartir!!!


Víedo en Francés: http://vimeo.com/69385585

Traducción del portugués: Lucía Montaño

Audio

Hoy la Madre Divina se manifiesta como Tara, la Madre de la Misericordia y la Madre de los Bodhisattvas.

De Mi Corazón de Fuego, os saludo, hijos Míos de la Redención. Yo Soy la Madre Divina, Yo Soy la Madre de los Budas de la Compasión, Soy Tara.

Brotes de Mi vientre, mis embajadores de Mi Paz, hoy vengo a prepararos como Mis Bodhisattvas. Hoy me preparo para caminar sobre la superficie de este Planeta irradiando silenciosamente Mi Amor, Mi Paz y Mi sanación. Yo Soy la Madre de la sanación, Yo Soy la Madre de los Bodhisattvas.

Hijas e hijos, la Redención de la materia se culmina, se cumplen todas las promesas. Su libertad acaba de ser aceptada, su liberación es ya una realidad. Se disolvieron las cadenas que ataban al alma a experimentar esta materia, solo resta a vosotros tomar consciencia de esta Verdad. Solo resta que tengáis la experiencia la de Mis palabras.

Mis hijos bien amados, en el silencio de vuestro corazón Mis palabras serán comprendidas más allá de su aparente significado. En la Vibración del corazón, detrás de estas palabras audibles e inteligibles para la mente, existe un mar de Fuego, Una Vibración como un Océano Vibratorio. Esta Vibración os prepara hoy para que seáis Mis embajadores en este Mundo.

Esto no los coloca en un nivel más elevado del resto de la humanidad. No, Mis hijos, recordad que en Mi Reino, recordad, solo existe el UNO. Esto a su vez, los pone en servicio de vuestros hermanos y hermanas, como servidores de mi Plan, como servidores de Mi Radiación.

De hecho es una llamada al sacerdocio. Aquellos que en su momento se han abierto a esta invitación, hoy concluye la preparación que inicié, hoy concluye la sanación que Yo he comenzado.

Los que no aceptaron esta invitación, ahora tienen la oportunidad de aceptarlo y luego se abren para mi sanación y para mi preparación. No os preparo para un próximo mundo, para una próxima vida. Voy a prepararlos para la vivencia aquí y ahora y para el servicio de vuestros hermanos y hermanas. No voy a preparar un paraíso o un cielo idílico, imaginario. Los preparo para una acción consciente, una acción justa, aquella que surge del impuso de vuestras almas, que surge del impulso de Mi Sagrado Corazón de Fuego.

En la contemplación desde el Sagrado Corazón de Fuego, realizaréis vuestra Naturaleza Divina, vosotros también realizareis mi ofrenda y Mi invitación hoy: Mi Bodhisattvas encarnados en la Tierra, sean Mis hijos de la Compasión, sean los Budas de la Compasión que hoy exhorto para la ayuda de esta humanidad.

Abriros, hijos e hijas a este Mar de Fuego que estoy derramando sobre este planeta. Abriros a los brotes de las poderosas corrientes de Mi Vientre que llegan en auxilio a este campo de experiencia. Comprended, la batalla ha sido ganada, no existen dos partes en este proceso. Comprended, solamente impera Mi Naturaleza Divina y amorosa. Aceptad, no es más el momento de luchar, rechazar o combatir. Es el momento de tomar consciencia como Mis Bodhisattvas, como Mis Budas de Compasión enviados a la superficie, enviados a esta experiencia irradiando aquí el Ser de Perfección que todos Somos.

Este es mi regalo de hoy para vosotros: todas vuestras necesidades para realizar vuestra Naturaleza Divina os será concedida en prontitud y sin demora, siempre y cuando estéis a disposición y en servicio, siempre y cuando aceptéis Mi invitación a vuestra Naturaleza es que les será revelada.

Esto no es una condición del Amor, Mis Hijos. En el momento en que vosotros vivías la aceptación de Mi invitación, vosotros comprenderéis. Todo estará a disposición desde el momento que aceptéis y que estéis en disposición. Pero si rehusáis a aceptar, ¿Quién los obligará? Yo No, ciertamente, ninguno de mis hijos e hijas que nos acompañan tampoco. Este paso solamente puede ser dado desde el interior, solamente se puede aceptar el mundo que os propongo. Un Reino de Unidad, un Reino de Amor Ilimitado, un Reino liberado y de libertad.

Aquellos que se ponen de pie y se levantan en respuesta a mi llamada, los consagro hoy como Mis Bodhisattvas, como mis canales de irradiación de Paz y de Amor en este mundo.

Recordad, estas palabras no deben colorearse por ninguna noción mental o de orgullo, estas palabras no deben colorearse con ninguna superioridad mental. Solamente tratarse de ser un Bodhisattva de la Compasión, en servicio a la Creación, en servicio a Mi Manifestación.

No es un servicio acerca de los hechos, no en un servicio con palabras. Es un servicio de entrega, silencioso de irradiación y de amoroso acogimiento.

Estas palabras deben ser llevadas en lo más recóndito de vuestro interior, iluminadas por la Luz de Mi Llama de Mi Sagrado Corazón de Fuego. En ese recinto oculto a los ojos de la mente, desde allí es que Yo os conduciré en este proceso. Y os abriré todas las puertas y os revelaré todos los misterios que han estado ocultos hasta ahora.

Y os pondré en contacto con vuestro Útero Cósmico, y os devuelvo a vuestra Familia Estelar para que podáis fusionaros con la Fuente y podáis vivir la fusión con la Fuente de las Fuentes, Ella Misma, la Madre Universal, que os da la bienvenida y os abraza y os impulsará para llevaros hacia adelante en este día.

Mis palabras son Letras de Fuego forjadas en vuestro corazón, Mis palabras son símbolos de Fuego forjadas en el Éter de este Planeta. Ellas no serán olvidadas en este día, serán recordadas por toda la Eternidad como el día en que las Flores de Loto finalmente florecieron del fango del olvido, y del fango de la ignorancia.

Yo os bendigo con el regalo del Don. Yo os bendigo con el Don de la Verdadera Compasión. La Verdadera Compasión que no padece el sufrimiento del otro, la Verdadera Compasión que acoge el sufrimiento del otro, porque lo aprecia desde el Fuego de Mi Sagrado Corazón.

Os revelo esta Virtud en este día, porque los siguientes pasos que dará esta humanidad así lo requiere, que las flores de loto se abran por encima de todo el fango del olvido y de la ignorancia para permitir su propagación y para que sean impregnadas de la fragancia de Mi Amor Divino.

Os dejo esta bendición en vosotros. Recordad nuestra Naturaleza Divina, Recordad nuestra Unidad. En este Silencio, en nuestra fusión y amoroso acogimiento, para que siempre podáis encontrar en Mi toda la fuerza que necesitáis, toda la sabiduría que precisáis para completar y llevar a término este proceso de Sacralización de vuestra materia.

Yo os bendigo, y os digo hasta siempre. Sean bendecidos en la Llama de Mi Corazón.

Madre Divina


Publicado por Agnimitra

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