https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhZ08843ql7qmgVinxUwvi0VeMpGpXcdlUi_TDwzE5la_iX0j7CtdFyQ7LM7p8zzgWAYJjXPzHwclvs3_TsWsVBuVNK6xYSxkxaC1ivgD7eabt-UmUy6N80s11Xp0zPus309DcNG_S6_AKl/s1600/jesus20sananda.jpg
Todos han elegido viajar a la velocidad que más les conviene por el momento, y en cualquier instante, puedes cambiar la velocidad, eligiendo ya sea aumentar o disminuir la misma.
La afluencia de nuevas energías amorosas, que han comenzado a fluir con fuerza e insistencia en todo el planeta, están animando a todos a aumentar la velocidad con la que se están involucrado en su viaje de regreso, y eso tiene mucho sentido.
¿Por qué querrías pasar más tiempo en la ilusión donde experimentas tanta confusión, incertidumbre e incluso caos, cuando podrías rápidamente volver a casa a la alegría eterna del reino divino de tu Padre?
Como saben en lo profundo de ustedes mismos, son seres divinos, espirituales teniendo una experiencia física. Sin embargo, parte de esta experiencia ha sido el olvido de quien eres en realidad.
Fue una decisión que hiciste para asegurarte que tu experiencia física pareciera totalmente real para ti, para que experimentaras las lecciones que querías aprender desde el principio.
Si fueses capaz de recordar quién eres realmente, las lecciones te serían de poca utilidad práctica, porque ya sabrías el tema desde el más alto nivel posible de entendimiento – y efectivamente no habría nada que pudieses aprender.
Por supuesto que esto suena como una tontería, dado que, ¿por qué ocultar el conocimiento de sí mismos para encarnar como seres humanos y aprenderlo de nuevo? De hecho, es una paradoja que lleva a mucha confusión.
El amor del que nuestro Padre creó a todos los seres sintientes es una energía infinitamente abundante, sabia, conocedora, creativa y de gran alcance.
Se puede acceder y utilizar de múltiples maneras – maneras que, en tu limitada forma corpórea, no puedes concebir.
Es posible que los seres espirituales elijan trabajar con un sólo aspecto de esa energía o un número infinito de ellos.
Por ejemplo, trabajar sólo con el poder, puede conducir a desequilibrios enormes en el conocimiento y la percepción, si los fines para los que se utiliza y desarrolla, no están alineados con las necesidades de sabiduría, armonía, cooperación y el mutuo interés, al operar sólo a través de ese aspecto.
Al estar encarnado y tener una experiencia física en la Tierra, los seres sintientes pueden utilizar los diferentes aspectos del campo de la energía divina individual para aprender y entender las responsabilidades que van con ellos y que tienen que ser aceptadas e incorporadas en ese uso, mientras que al mismo tiempo, se garantice que ningún daño importante puede ser causado por errores u omisiones debido al olvido o descuido de responsabilidades.
Básicamente, se inventan juegos que son jugados, y las consecuencias que se presentan después, representan las lecciones que, cuando son aprendidas, conducen una comprensión y sabiduría mucho mayor de lo que podría ocurrir sin la presencia de las limitaciones que la encarnación humana conlleva.
Al convertirse en seres humanos, han elegido experimentar un estado de conciencia muy limitado para los retos y las lecciones que deben acometer.
Esto es parte del estado irreal de separación que se inició cuando inventaste y construiste la ilusión, y ahora debes, por decirlo así, reconstruir los aspectos divinos de ti mismo que no son inmediatamente obvios para ustedes como seres humanos, pero que son accesibles a través de la oración y la meditación cuando haces el intento de ser guiado espiritualmente, con el fin de volver a casa.
Reconstruir en realidad no es la palabra correcta, porque ninguna parte de ti ha sido destruida o demolida – cada aspecto de ti se creó eterno, inmortal y divino – y nunca lo podría ser, pero es útil como una analogía.
La experiencia de ser un humano está tan alejada de tu verdadera naturaleza, que volver a ese estado sin una preparación adecuada sería terriblemente perturbador, porque podrías guardar recuerdos de actitudes y comportamientos que has adquirido, que están totalmente alejados de la situación amorosa en la que fuiste creado.
No sería evidente al principio que lo que se recuerda no es más que un estado irreal que nunca ha sucedido, y ver estos aspectos de desamor en ustedes mismos pareciendo reales sería terriblemente alarmante y preocupante.
Ustedes son seres divinos, seres de Amor, y sería totalmente incomprensible y reprobable el verse a sí mismos como mucho menos que eso, como seres que podrían voluntaria y alegremente al parecer, causar sufrimiento a otros seres sintientes.
Y en la Realidad, eso es de hecho imposible, pero tener recuerdos aparentes, recuerdos de cosas, acontecimientos, comportamientos, acciones que no son totalmente amorosas, en las que parecería que habías tomado parte, sería devastador para ti- a pesar de que “nunca ocurrieron”.
Imaginar situaciones como esas, están más allá de los reinos de la posibilidad para los seres divinos, que es lo que eres. Así que, encontrarse albergando esos recuerdos, aunque sean irreales, sería realmente impactante.
Regresar a tu estado plenamente consciente y natural – despertar a la Realidad – es lo que estás haciendo a medida que luchas con la confusión y el sufrimiento de la ilusión.
El camino a seguir es sacar de dentro de ustedes, todo aquello que no sea amoroso, incluso lo más pequeño, o que no esté en alineación completa con el amor.
Y mientras sueltas los aspectos irreales de ti mismo, que nunca han sido parte del ser divino que tu Padre creó, los recuerdos unidos a ellos todos se disolverán, de modo que puedes despertar completamente en el esplendor, la belleza, la paz, la armonía y el Amor que es tu estado natural y eterno.
El camino a casa, garantizado y divinamente asegurado por tu siempre amoroso Padre, es a través de la liberación, la liberación completa de todo lo que no es de Dios.
Esa es la tarea en la que actualmente están plenamente comprometidos, y el fracaso no es una opción ni una posibilidad.
Ustedes son seres de amor que regresan a la conciencia de ese estado divino y maravilloso.
Tu hermano que te ama, Jesús.
No hay comentarios:
Publicar un comentario