Publicado por Ari Shemoth el diciembre 20, 2012 a las 7:20pm
El mundo es redondo y esto trae consigo las diferencias horarias. Por tanto, mientras en algunas partes de América era aún mediodía del 20 de diciembre, en otros puntos del planeta ya iniciaba el viernes 21 de diciembre.
El primer lugar a donde llega el nuevo día en la isla Kiritimati, conocida como Christmas, de origen coralino que pertenece a la República de Kiribati. Este lugar tiene una superficie de 642 kilómetros cuadrados. Junto a esta isla recibe el nuevo día también Samoa y Tokelau.
Otras zonas donde se podría decir que ya están "en el futuro", siendo todavía jueves en Ecuador, es la famosa ciudad de Sídney, en Australia, país en donde ya la mayoría de ciudades, como Perth, Brisbane y Melbourne, están en las primeras horas del famoso 21 de diciembre.
Otro país donde ya se reciben los primeros rayos de sol es Nueva Zelanda, siendo así que cuando en Wellington el reloj marcaba las 06:00 del 21/21/2012, en Guayaquil y Quito recién eran las 12:00 del 20/12/2012.
Una de las expectativas erróneas que se propagaron en torno a la fecha del 21 de Diciembre, tiene que ver con el famoso fin del mundo, en donde posteriormente se estuvieron haciendo múltiples aclaraciones por diversas fuentes (incluyendo al pueblo maya) para desmentir los pronósticos de investigadores y espirituales mal fundamentados.
Otro evento que se colgó a esta situación tiene que ver con el concepto del cinturón fotónico y los días de oscuridad que se producirían sobre el planeta al entrar en esta órbita. Dicha situación tampoco tiene que ver con el Cambio de Conciencia y el fin de un ciclo galáctico pronosticado por los mayas. En cuanto a las energías cósmicas que serán transmitidas por el Sol Central (Hunab Ku) afectando así nuestro ADN en pro de un mayor desarrollo y evolución. Cabe señalar que estos cambios se estarán realizando de manera gradual y personalizada, por lo que dicha experiencia no es conveniente promoverla y exaltarla de manera colectiva. Incluso esto podría ser hasta contraproducente al fomentar una especie de enajenación por vender expectativas irreales.
Los cambios más fuertes serán al interior y sobre la conciencia de cada individuo en diferentes grados y niveles. Esto también aplica para las reacciones físicas. Cada persona estará experimentando estos cambios energéticos de forma diferente a lo largo de los meses que preceden al equinoccio de la primavera. Habrá fuertes contrastes en todo este proceso, desde lo que no sientan absolutamente nada, hasta los que se perciban de manera muy diferente y despierta.
Ari Shemoth
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