lunes, 3 de octubre de 2011

SRI AUROBINDO 30 de Sept. 2011 con audio

 Esto permitió, he aquí algunos días, anunciar la llegada de sus Bodas de Luz que, en realidad, firman el fin de los tiempos. Entiendan, por allí, que el fin de los tiempos no es, ni el final del mundo, ni su final sino, más bien, un cambio.

Esta Boda de Luz (este Encuentro final con la Luz que firma el fin de los tiempos) corresponde, para ustedes, a estos tiempos que se realizan y lo que se realiza, es, efectivamente, la Vuelta de la Luz. 

Original en francés.
http://www.autresdimensions.com
Canalizado: Jean Luc Ayoun
Transcripción: Véronique Loriot
Traducción: Odilia Rivera
http://mensajes-del-espiritu.blogspot.com
http://mensajes-del-espiritu-2010.blogspot.com

Para escuchar el audio haz clic aquí

http://www.yakitome.com/data/1458055779/yak_tk8_J9xgSpbNb70z4btzl8EuDzeT5ERW9xjyWE5V6SwNY85zTMgyBhRx5Z9HVZ9RQ1CnIT0etycf9SGMQknz4bvVHj_ILkotENH8z.mp3


Soy Sri Aurobindo. Hermanos y Hermanas, personificados en la carne, reciben mi Luz que es suya, la Luz azul del Éter. Hoy estoy, con ustedes, elegido por el conjunto de los Ancianos, para desarrollar esta frase: “Los tiempos están realizados”. Es hora, hoy, de precisar de nuevo una serie de elementos, los cuales he traído, a lo largo de estos meses y estos años que pasaron, en su calendario, para expresárselos.

Comencemos, en primer lugar, por esta vuelta hacia atrás: la instalación inicial de la primera Fusión de los Éteres (en diciembre de su año 2009), seguida, aquí ahora hace un año, por la Liberación del Sol y, a continuación, del Núcleo Cristalino de la Tierra. Les anuncié, también, un proceso particular llamado, he aquí algún tiempo, el choque de la humanidad, sin precisar, en esta época, el tipo de elemento (que, para cada uno, es diferente) contribuyendo a establecer esta revolución y esta posible esperanza de cambio total de Conciencia, de Visión, trayéndoles, con carácter colectivo (en esta humanidad personificada), a plantearles las cuestiones deseables, en cuanto al sentido de la vida, en el sentido de vuestra vida y en el sentido de la Conciencia.

La preparación que ha sido llevada, por todos vosotros, desde hace un año muy precisamente, permitió, como ya se sabe, mantener la Merkabah Interdimensional colectiva, como Puente de Luz, permitiendo reunir esta Dimensión (dónde están aún) y nuestros Mundos. Esto permitió, he aquí algunos días, anunciar la llegada de sus Bodas de Luz que, en realidad, firman el fin de los tiempos. Entiendan, por allí, que el fin de los tiempos no es, ni el final del mundo, ni su final sino, más bien, un cambio. Un cambio hacia nada similar puesto que va a permitir, en un tiempo corto y, como ya se sabe, indeterminado (inscrito, no obstante, en un determinado número de acotamientos precisos), a vivir (o no) la instalación de su Conciencia en un tiempo nuevo. Este nuevo tiempo es un tiempo que les es desconocido. Y ello, muchos participantes se han expresado, con talento, por lo que se refiere a este pasar a ser después del Despliegue de la Luz. Muchos entre ustedes constituyeron su Nuevo Cuerpo y prepararon su estado Vibratorio permitiendo vivir estas Bodas de Luz, dentro de este cuerpo y esta Conciencia. El conjunto de los preparativos pues se acabó, aquí hace poco tiempo, volviendo posible (como, por otra parte, se los había dicho nuestro Comendador, desde el mes de abril), el tiempo de la Ascensión. Tiempo de la Ascensión, para ustedes seres humanos, que corresponde al parto de la Tierra y a la instalación de lo que describí (en mi última vida) por la llegada del Supramental, enteramente, viniendo, sobre esta Tierra, a transformar toda vida, toda Conciencia y establecer lo que había llamado, en la época, la Supra Conciencia.

La instalación de esta supra Conciencia se hace, por supuesto, de distintas maneras, según que el humano (que es el objeto y el apoyo) haya vivido su propia Boda de Luz o no, según que se active, en él, una de sus Coronas Radiantes o uno de sus Hogares, permitiendo, hasta cierto punto, de acoger la precipitación de la Luz Adamantina, no solamente en sus cielos pero, sobre esta Tierra. Y, entiendo por “sobre esta Tierra”, la Revelación del CRISTO: la Revelación de la Luz blanca en el conjunto de la humanidad que se traducirá, en ese momento, en las Bodas colectivas de Luz. Por supuesto, este proceso (que debe desarrollarse en el tiempo que viven) es un proceso que se refiere, tanto a lo que es visible, que lo que a ustedes es, por el momento (para la mayoría) aún invisible. No existe una célula (de ningún cuerpo, ni ningún lugar de este sistema solar) que pueda evitar el Encuentro con la Luz. Las Bodas de Luz son llamadas a ser, para ustedes quienes aceptan la Luz, un estado de Alegría inefable. Algunos de entre ustedes se acercaron, o en los períodos de Alineación, o en distintos momentos (para ellos, los más fáciles), que eso o en sus noches, que eso o en momentos convenientes o inoportunos.

Todo contribuye, en adelante, a hacerles vivir este Encuentro a la Luz. Esta Boda de Luz (este Encuentro final con la Luz que firma el fin de los tiempos) corresponde, para ustedes, a estos tiempos que se realizan y lo que se realiza, es, efectivamente, la Vuelta de la Luz. La Vuelta de la Luz que, como ya se sabe, fue posible por un conjunto de elementos, un conjunto de Conciencias (y, cada uno y cada elemento ha tenido su lugar, su papel y su función) desde lo que es llamado la Ola Galáctica (que corresponde a la Alineación de este sistema solar con el Centro Galáctico), desde la llegada de Radiaciones particulares (viniendo del final fondo de los Universos), pasando por nuestra Presencia y la Presencia de los Arcángeles, así como de las Estrellas, así como vuestra propia Presencia y vuestro propio Despertar, que se hizo, diría, de manera progresiva. Y llevándoles, hoy, a cruzar la última Puerta (la de la Realización de la Unidad, la Realización del Amor) y, por fin, por permitir decirles, en ustedes como sobre esta Tierra: “todo está realizado”. “Todo está realizado”, una vez más, no es el final del mundo, aún menos, el final de la vida pero, decimos, el final de una determinada forma de vida.

Todo lo que se les ocultó está revelándoseles, enteramente. Eso había comenzado en el período de la desconstrucción (inicializada por el Arcángel Mikaël) y por el derrame de las primeras Partículas Adamantinas y de las primeras Radiaciones del Ultravioleta. En la actualidad, se establece la totalidad de las circunstancias previas, que les son Interiores como exteriores. Se les establece aunque, como ya se sabe, en el conjunto de la humanidad, muchos seres humanos no pueden prever (ni imaginar incluso o percibir) los mecanismos que están viviéndose. Por supuesto, muchos entre ustedes ya percibieron el descenso de las Partículas Adamantinas, no solamente en forma de partículas pero, lo que llamaremos, conjunto, el Supramental estructurado, visibles, en sus noches (en el cielo), visible, por eso, como cuadriculados presentes en su techo al lugar donde duermen. Todo esto, así como la Presencia (para algunos de entre ustedes) de los Ángeles del Señor, así como del Canal Marial, así como de los Sonidos, apareciendo de diferente manera en sus orejas, traducen el Acontecimiento. Este Acontecimiento, por supuesto, es la Vuelta del CRISTO, tal como lo había descrito cuando fui San Juan. Todas las circunstancia previas a esto que yo he escrito en ese momento, se realizan hoy.

Por supuesto, cuando les decía que volvería de nuevo como un ladrón en la noche, tienen la oportunidad, algunos días antes, por el Anuncio de MARIA, de saber, muy precisamente (sin poder especificar la hora) lo que ocurrirá. Numerosos grandes Seres (y, en particular, entre los Ancianos y entre los Arcángeles, así como Participantes muy excepcionales) les comunicaron una serie de circunstancias precisas (astronómicas, astrológicas, planetarias) correspondiendo a ese momento. El conjunto de las señales, por lo tanto, pasaron al verde para la Llegada de la Nueva Dimensión, lo que es convenido llamar vuestra Ascensión, la penetración de la Conciencia en su nueva esfera de vida. Así pues, es necesario, efectivamente, ahora, estar listos, enteramente. Estar listos quiere decir estar vivos, enteramente. Buscar lo más posible la Simplicidad. Buscar lo más posible la Alegría. Buscar lo más posible lo que les pone en Alegría. Y eso no puede ser realizable sino en el momento presente. La fuente de toda Alegría (así como se lo dijimos), la fuente de la Eternidad, no puede encontrarse sino en el momento presente, centrada en sus 4 Pilares, a vivir aquí y ahora. El conjunto de las percepciones Vibratorias que son suyas (o que no son aún los suyas), están allí para mantenerles, hasta cierto punto, en el seno, no de esta espera sino, bien, de este emplazamiento en el Advenimiento que sobrepasa, de sobra, todo lo que puedan imaginar en cuanto a la Vuelta de este CRISTO.

Les hemos, durante mucho tiempo, expresado la diferencia entre un salvador exterior y un Salvador Interior. Ampliamente, les expresamos, de distintas maneras, los principios mismos de la Unidad y eso que estaban supuestos a representar, tanto a nivel de sus aspectos Vibratorios, que de la propia Conciencia, que de sus comportamientos a adoptar (a manifestar) y las conductas (si se puede decir así) que tenían que manifestar, concretar, para prepararse a vivir estas Bodas de Luz. El conjunto de los acontecimientos que se abren, ahora, sobre esta Tierra, convergen, todos, hacia el mismo punto focal que es la última Reversión de la Conciencia, el último Paso de la Puerta Estrecha, que muchos entre ustedes realizaron (y lo realizan ahora mismo) a través, a veces, de la Noche Negra del Alma, a través de Vibraciones muy intensas pero, por eso, a través de nuevas percepciones de su propio método de funcionamiento. Todo es perfectamente sincrónico, diría, en la Tierra, como en la Conciencia humana, que se sentían listos o que ustedes no sentían listos. Recuerdan que algunos les dijeron que estaban, muy exactamente, en el buen lugar, en el estado donde están, con relación a su pasar a ser en la Unidad y en la Luz. La única cosa que queda, hoy, por aclarar, es de verdad, la posibilidad que les es dada, por la acción de la propia Luz, en adelante, de abandonarse, enteramente, a la Luz. No volveré de nuevo sobre este principio de Abandono a la Luz ya que se enumeró y detalló largamente.

Les digo que hoy, lo más importante no es reflexionar a cómo abandonarse a la Luz sino, más bien, de establecerse en espacios de Silencio Interior (en espacios de Alineación que les son personales) en los cuales están totalmente en condiciones encontrar la Conciencia que algunos de entre ustedes contactan, a la perfección, en los momentos de Alineación. Esto debe realizarse con la propia Conciencia. Incluso si existen algunas muletas, que sean del orden del cuerpo o del orden de elementos aportados (que se les comunicaron y que aplicaron), va a resultarles cada vez más evidente que se superponen, en ustedes, 2 mecanismos de Conciencia: su conciencia (al sentido habitual y personal) y su Conciencia Unitaria, en la cual asoman otras Presencias que algunos de entre ustedes tendrán dificultad a imaginar. Esta Presencia, dentro ustedes, se vincula, por supuesto, a la vez con la Presencia de su Cuerpo de Êtreté, a la vez con su Voz Interior y, a la vez, con la Presencia y la activación de lo que se llamó el Canal Marial (o el Canal de las Estrellas), en el Antakharana izquierdo. Todo esto va, cada día, a consolidarles en la acumulación de sus propias Partículas Adamantinas.

Muchos entre ustedes comenzaron a vivir estos mecanismos de precipitación, traduciéndose en una ocultación de la conciencia ordinaria, una ocultación de sus mecanismos de pensamiento ordinario, llevándoles a establecerse en lo que llamaría, la vacuidad y la plenitud, al mismo tiempo. Recuerden, por eso, que les dijimos decidir (en su fuero interior, en los momentos de Llamada a la Luz) lo que quieren ver establecer en su Conciencia: el Abandono o la resistencia. Por supuesto, la personalidad va siempre a pretender querer comprender lo que debe vivirse. Por supuesto, la personalidad va siempre a llevarles (en ustedes, como para las personalidades que les rodean) a alejarles de este estado de Ser. Podemos garantizarles que lo mejor que acepten este estado de Ser (que les parece, sin embargo, tan diferente de la conciencia ordinaria), lo mejor posible podrán terminar sus propias Bodas de Luz y, lo mejor posible podrán decir, como el CRISTO lo dijo, sobre su cruz: “todo está realizado”. En ese momento, eso querrá decir que el Espíritu se reveló enteramente en ustedes, que el CRISTO se reveló enteramente a ustedes, y que les muestra, en ese momento, lo que es la Alegría, lo que es el Amor, lo que es la Unidad y lo que es la Verdad.

En ese momento, se les instalará plenamente (conservando al mismo tiempo este cuerpo, hasta el momento de las Bodas colectivas) en su Unidad. Ninguna duda podrá ya rozarles, ninguna cuestión podrá aparecer en su Conciencia, establecida en la Alegría, en la Verdad y en su Unidad. Es en el sentido que digo que podrán percibir, dentro de ustedes mismos, otra Presencia. Que la llamen el CRISTO, que la llamen MARIA, que la llamen de cualquier otro nombre, qué más da. Percibirán, efectivamente, dentro ustedes, no un desdoblamiento sino un mecanismo de Fusión con otra Conciencia (mucho mayor, mucho más extensa, mucho más amplia) haciéndoles descubrir, si no lo han vivido, la Verdad del Amor y la Vibración de la Conciencia Unitaria.

Todo esto, algunos de entre ustedes ya lo vivieron, otros se preparan a vivirlo en un tiempo extremadamente corto. Este proceso que puede ocurrir, una vez más, en el momento más conveniente (y, a veces, más inoportuno, para ustedes), en cualquier caso, en un momento que se puede que calificar de fuerte. Este fuerte momento firmará, de manera indeleble, su contacto establecido, de manera consciente y definitiva, con el Êtreté y con los Planos Multidimensionales. Esto se anunció, para algunos de entre ustedes, por mecanismos Vibratorios apareciendo, tanto en la Corona Radiante del Corazón como de los Circuitos que firmaban la activación de los Nuevos Cuerpos o Nuevas frecuencias Vibratorias. Es en las que les aparecerá la Verdad, independiente de toda connotación o toda ley existente en este mundo. Harán, entonces, suya, la frase del CRISTO que había dicho que su Reino no era de este mundo y que, sin embargo, era sobre este mundo que debían concretarlo. En ese momento, oirán, distintamente, la Llamada del CRISTO para vivir el Amor, vivir la Alegría, vivir la Verdad. Se convertirán en independientes completamente de toda circunstancia exterior.

Lo que, aún hoy, puede apesadumbrarles, lo que, aún hoy, puede obscurecerles, no podrá existir más dentro de su Conciencia ampliada, en la Conciencia Turiya. Esto es, hasta cierto punto, sus Bodas de Luz y, en ese momento, ustedes podrán, efectivamente, decir, como CRISTO: “el tiempo se realiza, todo está realizado”. En ese momento, en esta realización particular de su Conciencia, se darán cuenta de lo que es la Alegría de la Eternidad. Se darán cuenta, dentro de este cuerpo, de lo que es el Samadhi, en su expresión más pura, la más intensa y la más profunda. Es en estos momentos particulares de instalación de este estado que deberán, de verdad, no buscar a pensar, no buscar a escaparse, no pretender poner en duda lo que se vive, pero instalarse y dejar instalarse el CRISTO, en ustedes. Estos momentos deben vivirse desde ahora. Se inscriben en un tiempo particular (que precede lo que se llamó el Anuncio de MARIA) y que les permite acercarse, a lo sumo exactamente, de lo que es su Eternidad, permitiendo, por eso, como eso se les dijo, de manifestar a su Êtreté, manifestar su conexión a la Fuente para el conjunto de sus Hermanos y sus Hermanas en humanidad que tienen bien necesidad (porque están desviados de la Luz por el momento) de esta prueba y esta evidencia de lo que han pasado ustedes a ser....

Ninguna cuestión tendrá ya curso porque en ese momento, sabrán que están, directamente, bajo la Inteligencia de la Luz que controlará su vida en todos los ámbitos. No tendrán ya ninguna inquietud que tener ya que, sea lo que pase en la superficie de este mundo, habrán penetrado el Interior de la Verdad. No podrán ser afectados, a medida de que esta Consciencia se instale, por cualquier preocupación. Esto no es una dimisión absolutamente de cualquier cosa sino, más bien, una lucidez total sobre los pormenores de la Conciencia, sobre los pormenores de su propia vida, así como los pormenores del conjunto de las Conciencias que los rodean, cualesquiera que sean sus papeles y sus funciones, cualesquiera que sean sus relaciones con ustedes. Es en este estado que se dibujará toda fuerza, toda vida, toda supervivencia y todo mecanismo que les permitirá penetrar y permanecer en la Alegría Eterna de la Presencia del CRISTO y la Luz blanca.

Esto está en marcha, ahora, de manera, como ya se sabe, definitiva, inexorable e ineludible y esto está en marcha y debe vivirse en el tiempo que viven, desde ahora. Algunos de entre ustedes, una vez más, comenzaron a percibir, que eso sea la Puerta posterior del CRISTO, que eso fuera la Puerta Estrecha o, aún, los otros Pilares, permitiendo manifestar esta Conciencia. En ese momento, se convertirán en, realmente, el observador. Realmente. Serán, no el tema, no el objeto pero la totalidad de la Conciencia una que podrá penetrar (dentro de este cuerpo) la totalidad de los mundos, la totalidad de las Conciencias y detendrán, en ese momento, todo mecanismo de proyección, miedo, anticipación, previsión y plan. Se instalarán, de manera duradera, en el aquí y ahora. Se instalarán, de manera duradera, en su Êtreté, en su Alegría, su serenidad y, sobre todo, de una Paz que no puede ser comparable a nada de más. Se les ofrecerán todos los elementos necesarios para su vida, en este mundo como en la nueva Vida, con generosidad ya que es su herencia y es su naturaleza.

Nosotros, Ancianos, nos tienen a sus lados y, también, en ustedes. MARIA se presenta a su Puerta lateral izquierda con el fin de vivificar su Espíritu, con el fin de impulsar (en el Pilar de la Unidad, precisamente) su Presencia que es su naturaleza, ella también. Todos los elementos que van a tener que presentarse a su vida, a su Conciencia, en el tiempo que viven, no tienen que juzgarse, de ninguna manera (que les conciernan o que se refieran a alguien más o quienquiera que sea y no ustedes) sino, simplemente, a estar de acuerdo, no en una dimisión, no en una denegación sino, bien, en un consentimiento a la Luz total, un “sí” total a la Luz, permitiéndoles, entonces, de concretar sus Bodas de Luz, cualquiera que sea el choque de la humanidad. Esto, así como lo saben, es inminente. Fue anunciado por las señales en el cielo y precede otras señales en el cielo que están, ellas también, a sus puertas, a la puerta de su Conciencia, a la puerta de su mundo y a la puerta de su Tierra. Esto se desarrolla ahora y, a cada minuto. Percibirán (si llegan a hacer callar su mental) la inminencia, la existencia y la persistencia. Es en todos estos acontecimientos, por lo que se refiere al conjunto de la Tierra, que se desarrollará, a la vez el choque de la humanidad y las Bodas colectivas de Luz.

El trabajo que realizaron, desde hace un año, el trabajo que ha sido realizado por los Gigantes desde hace muy mucho tiempo, el trabajo realizado por el conjunto del Cónclave Arcangélico y por las Estrellas, permitió acortar el intervalo de tiempo, tal como lo había descrito del tiempo en que CRISTO me lo daba bajo el dictado (mi Apocalipsis, dicho “Apocalipsis de San Juan”). El intervalo existente, en términos temporales, entre el choque de la humanidad y las Bodas colectivas se ve, hoy, reducido a su más simple expresión y a su tiempo más corto. Así pues, podemos decir, con ustedes: “alégrense”. Ya que la carga de sufrimientos se ve, de esta forma, en gran medida cortada y eso beneficia, obviamente, al conjunto de las Conciencias de ustedes que están sobre la tierra, ya sea que sean, directamente, afectados por los procesos vibraciones de acceso a la unidad o que sean afectados por el proceso de liberación de la humanidad que es, os lo recuerdo, directamente posible, para la totalidad de la humanidad. Hoy, podemos afirmar (y ustedes pueden afirmar) que, entre más se acerque CRISTO a ustedes menos tribulación tendrán de cualquier elemento de este mundo, menos cuestiones a plantear tendrán ustedes en relación con lo que se celebrará en este mundo (cualquiera que sea su importancia, cualquiera que sea su dureza), precisamente porque el tiempo que pasa, entre el choque de la humanidad y las Bodas colectivas de Luz, es un tiempo extremadamente reducido.

He aquí lo que tenía que anunciarles con relación a esta frase: “todo está realizado”. El fin de los tiempos es una realidad. Es el tiempo de la Ilusión que llega a su final. Es el tiempo de la Eternidad que nace. Este final no es un final. Es el final, simplemente, de la Ilusión. Es el final de las quimeras. Es el final del encerramiento. Es el final del sufrimiento. Es el final de la opresión. Es el final de la muerte y el principio de la verdadera vida. No tienen que plantearse cuestiones en cuanto a su pasar a ser ya que, como lo repetimos y aporreamos, permanentemente, su Vibración es su pasar a ser, ya que la Conciencia es Vibración. Más allá de eso, les queda exactamente (cada minuto y cada respiración) acumular cada vez más Transparencia, dejarse penetrar y atravesar por las Partículas Adamantinas, por las Radiaciones de Luz, permitiéndoles establecerse en esta Alegría, de manera eterna y definitiva. Allí está (como se los dijimos) el sentido del Servicio, el sentido del Amor, el sentido de la devoción, en la Unidad.

Así pues, termino (podría decirlo) la alocución que los Ancianos me encargaron de transmitirles. Por supuesto, visto lo que acabo de enunciarles y de anunciarles, permanezco, ahora, a su disposición, si hay cuestiones, en ustedes, a las cuales pueda responder. Les ruego, no obstante, eviten todo concepto temporal. El tiempo es ahora. Este “ahora” se vive, sobre todo, en su Ser Interior. Les corresponde vivir, dentro, el cambio, para ver este cambio realizarse aquí-mismo, bajo sus ojos. Pero, no olviden que son el cambio que va a realizarse en el mundo y que, si no viven este cambio dentro ustedes, no hay ninguna razón que este cambio se manifieste exteriormente. Aunque el conjunto de los elementos de la Luz se precipitan, en adelante, al suelo de esta Tierra (tal como podrán verlo, a partir de esta noche, en el cielo), entonces, en ese momento, vivirán la transmutación final y podrán decir, como el CRISTO: “todo está realizado”. Allí se detiene mi intervención formal. Viene, ahora, el tiempo de sus cuestiones.

Cuestión: que significa: ¿“abrir su Corazón”? Abrir su Corazón es un estado de consciencia. Es un estado de Vibración que se acompaña de Paz, Alegría, serenidad. Es acoger, por fin, el CRISTO. El CRISTO no puede penetrar sino en un Corazón pacificado. Se los había dicho que volvería de nuevo como la espada que viene a cortar. Es el que viene a preguntarles si quieren seguirlo, en la Eternidad.

Cuestión: ¿el Fuego del Corazón se propaga a partir de un solo punto o puede resonar en varios lugares del cuerpo? Puede resonar en todos los puntos del cuerpo pero, por eso, de extenderse a todo el cuerpo. Este proceso, por otra parte, debe desarrollarse en su Conciencia, en su Templo.

Cuestión: ¿qué es lo que diferencia la Visión del Corazón y la Visión Etérica? La Visión Etérica es una especificidad del ojo que se abre a nuevas frecuencias y enganchada por el proceso de puesta en servicio de lo que llaman el punto AL. La Visión del Corazón es, simplemente, entender, aceptar y vivir que el conjunto del Universo no está en otra parte que en su Corazón. Todo lo demás, apareciendo fuera ustedes sólo es, simplemente, el reflejo de su propia proyección. La Visión del Corazón, es ser capaz de englobar el conjunto de los Universos, Mundos, Dimensiones, dentro de su Templo, haciéndoles decir, entonces, como lo dijo el CRISTO: “yo y mi Padre somos Uno”, “lo que hacen al más pequeño de entre ustedes, es mi quien lo hacen”.

Cuestión: ¿cuándo se tienen los ojos cerrados y que las visiones de Seres se desarrollan delante de los ojos cerrados, eso proviene del 3er Ojo o del Corazón? La Visión del Corazón es la Visión del Corazón. No pueden verla con los ojos abiertos o cerrados. Eso se ve en el Corazón. Ver en el Corazón no es una vista del espíritu o una imagen. Es la realidad de lo que pasa cuando están en la Visión del Corazón. Muchos místicos demostraron esta capacidad para conocer a otro, en su totalidad, a conocer los hechos y gestos de su vida, simplemente porque estos Seres habían conseguido vivir el Corazón, enteramente. A partir de este momento allí, la Visión del Corazón no puede ser una Visión exteriorizada de cualquier cosa. Es una Visión Interior, no teniendo nada que ver con una visión alterada (llamada astral) o que no tiene, aún menos, que ver con lo que se llama la Visión Etérica. Es la percepción, clara, consciente, lúcida y precisa de que todo está dentro de ustedes. Cuando los Arcángeles, cuando nosotros mismos, les hemos dicho que estamos dentro de ustedes, esto no es una vista del espíritu, no es una imagen, ni una concepción, sino es la Estricta verdad. Sólo por la instalación, en HIC y NUNC, y por la estabilización en la Humildad y la Simplicidad, que la Visión del Corazón se realiza. No obstante, a partir del momento en que el Fuego del Corazón está activo, a partir del momento en que la Vibración del Corazón está activa, a partir del momento en que uno de los Puntos (o los Puntos) que corresponden a KI RIS TI (la Puerta Estrecha, la Puerta de la Unidad, la Puerta AL) están abiertos, en el pecho, no hay más cuestión que plantearse con relación a lo que les de a vivir la Luz, ya que hay.

Cuestión: ¿cómo saber si las imágenes responden del astral y, en caso afirmativo, que hacer? Toda visión, vinculada a lo que aparece cerrados los ojos, corresponde, innegablemente, a esto que llaman el astral, cualquiera que sea este astral. Pero, entiendan que no existen elementos negativos. Muchas cosas pasan de esta forma allí (la cara de sus últimas vidas, la cara de sus últimas encarnaciones, a veces de las últimas escenas de vidas pero, por eso, lo que puede producirse con relación a percepciones astrales de lo que se llama el futuro). El Seres de la Luz (de la Luz Vibral Unitario) no pasan, nunca, por el astral.

Cuestión: ¿qué conviene hacer cuando tales visiones astrales aparecen?Querida hermana, así como lo dijera Buda: “sálvate rápidamente”. Ponerse de nuevo en el Corazón y en la Vibración del Corazón ya que, a partir del momento en que la Conciencia se lleva sobre el Corazón, efectiva y concretamente, esta clase de manifestaciones desaparece, enteramente.

Cuestión: ¿y después de haber observado a alguien con los ojos abiertos, tener su visión que dura con los ojos cerrados corresponde a qué? Este proceso es el mismo exactamente que lo que puede suceder fijando la llama de una vela. Eso se llama, simplemente, una persistencia retiniana. Eso no tiene nada que ver, ni con el astral, ni con los Planos de Luz. Es un proceso fisiológico.

Cuestión: ¿por qué habla de Visión del Corazón puesto que no hay elemento de visión? Porque, precisamente, eso es la verdadera Visión. Esto está vinculado a su concepción limitada que les hace asimilar la visión, al ojo. En las Dimensiones Unificadas, el ojo no existe y, sin embargo, ustedes ven.

Cuestión: ¿esta Visión del Corazón, corresponde al conocimiento completo? Eso puede expresarse así.

Cuestión: a qué corresponden las palabras de CRISTO: ¿“Padre, por qué me has abandonado” que él pronunció sobre la cruz? Esta frase corresponde al sufrimiento del cuerpo y a la percepción del Abandono. El Abandono por la Luz precede el Abandono a la Luz. Es una visión vinculada a la personalidad que se vive y se cree abandonada por la Luz. Es en ese momento que se realiza el Abandono a la Luz, no antes. Eso se llamó la Crucifixión.

Cuestión: ¿es una etapa obligatoria para cada uno de entre nosotros? Es exactamente lo que van a vivir, si no lo han vivido.

Cuestión: ¿qué es la Transfiguración? Es el primer Encuentro con la Luz. La Transfiguración es el momento en que la Luz les toca. No es aún el momento en que CRISTO viene y les dice: “soy yo”. Es el momento en que el Alma toma conciencia de la Luz. La toma de conciencia de Luz es el primer Encuentro con la Luz. En ese momento, el Alma debe, por eso, vivir su propia Crucifixión para descubrir el Espíritu. La Transfiguración correspondería a la Llamada de la Luz. La Crucifixión corresponde, allí, al Abandono a la luz de dónde se deriva la Resurrección que permite decir: “todo está realizado” porque el Espíritu realizó la Ilusión de la persona y la Ilusión de este mundo.

Cuestión: ¿el Fuego del Corazón se propaga a la superficie del cuerpo o va, también, dentro? Está por todas partes. El Fuego del Corazón es la naturaleza ígnea del Amor. Es el momento en que el último sobre aislante (presente en el Corazón) desaparece y les da a ver la Verdad, con el Corazón, (a ver y percibir la Unidad), no como una proyección, no como un ideal sino como la estricta Verdad de la Conciencia. Todo es Alegría. Todo es inefable. Todo es Belleza. Y todo es Gloria en la Unidad.

Cuestión: ¿“todo está realizado” sólo puede ser definitivo? A partir del momento en que se realiza todo, por supuesto que eso es definitivo e irreversible. Eso se llama la Resurrección.

No tenemos más cuestionamientos. Les agradecemos. Hermanos y Hermanas humanos, en la carne, vivan un espacio de Comunión en el Éter de la Luz azul, de la Alegría. Les digo, por mi parte, hasta un día próximo y que la Paz les acompañe.

... Efusión Vibratoria…




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